Disfrutemos más de un día Oración por dormir Tranquilo, siempre con la bendición de Dios.
Oración por un sueño tranquilo y protegido
Dios, venimos a ti y dejamos todas las preocupaciones porque te preocupas por nosotros. Danos una buena noche a la sombra de tus alas, bajo tu acogedor abrigo. En paz me acuesto y duermo porque solo tú, Señor, me haces vivir con confianza. Amén.
Gracias, Padre, por darnos esta noche para descansar, gracias por nuestra bendición y guía, por tu amor y cuidado. Dormimos felices porque estarás con nosotros. Amén.
Al final de este día, Señor, se me da descanso pidiendo perdón por las ofensas que he cometido. Ten piedad de mi Señor, sana mis heridas, quita mis preocupaciones y penas, y mañana, cuando me despierte, vuelve mis ojos hacia ti. Amén.
Padre, Dios Todopoderoso, defiéndeme y protégeme esta noche de todo peligro y pecado. Permite que la luz de tu amor ilumine estas horas de sueño. Protege a toda mi familia, ya sea cerca o lejos y sálvanos de cualquier peligro. Amén.
Padre celestial, me preparo para descansar, te pido que me ayudes a ser fiel incluso en mi sueño, ayúdame a descansar mi alma que necesita, y ayúdame a despertar mañana con muchos ánimos y deseos de vivir el nuevo día que me darás si fuera tu voluntad. Amén.
Oración por los niños dormidos
Mi cama tiene cuatro pequeños rincones, cuatro angelitos la guardan para mí, Lucas y Juan y Matías, nuestro Señor y la Virgen María. Señor Jesucristo, bendice tu altar, bendice mi cama en la que me acostaré. Amén.
Cierro los ojos y te pido que bendigas mi sueño y me cuides, y me guardes con tus angelitos. Amén.
Descansaré esta noche porque tú me cuidas. Gracias por cuidar de mi casa y de toda mi familia. Amén.
Señor Jesús, cuídame esta noche, cuida de mis padres y hermanos, cuida de mi familia y amigos, y enséñame a amarte más cada día. Amén.
Jesusito de mi vida, eres un niño como yo, por eso te amo tanto y te entrego mi corazón, ¡tómalo! ¡Empezar! Tú, el mío no lo es.
Ángel de la guarda, dulce compañía, no me dejes ni de día ni de noche, no me dejes solo hasta que esté perdido. Amén.
Con Dios me acuesto, con Dios me levanto, por la gracia de Dios y del Espíritu Santo.
Querido Dios, hoy te ruego que me cuides dondequiera que estés. Dondequiera que vaya, acompáñame. En todo lo que hago, ilumíname y bendice en todo momento a mis seres queridos. Amén.
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